
La empanada gallega es uno de los platos más emblemáticos de la gastronomía de Galicia. Con una masa crujiente y un relleno jugoso, esta receta ha pasado de generación en generación, convirtiéndose en una comida casera ideal para cualquier ocasión. Se puede disfrutar tanto caliente como fría, lo que la hace perfecta para reuniones familiares, picnics o comidas del día a día. Aunque hoy en día existen muchas versiones, la empanada de bonito o atún con pimientos y cebolla sigue siendo una de las más tradicionales y apreciadas.
Este plato tiene su origen en la cocina medieval gallega y se cree que proviene de la necesidad de preparar alimentos que fueran fáciles de transportar y conservar. La masa de pan envolvía distintos rellenos, protegiéndolos y permitiendo su consumo en viajes largos. Actualmente, se pueden encontrar empanadas con distintos ingredientes, como la empanada gallega de carne, la empanada gallega de pollo o incluso versiones con mariscos.
Hoy te enseñamos a preparar la receta original de empanada gallega con una masa casera esponjosa y un relleno lleno de sabor. Si prefieres una versión más rápida, también puedes hacer la empanada con masa comprada, aunque el resultado no será el mismo. Sigue los pasos y descubre cómo hacer la mejor empanada gallega receta fácil.
Ingredientes para 4 personas
Para la masa:
- 780g de harina de fuerza (6 1/3 tazas)
- 180ml de aceite de oliva virgen extra (3/4 de taza)
- 200ml de agua tibia (3/4 de taza + 1 cucharada)
- 14g de sal (2 1/2 cucharaditas)
- 7g de levadura fresca de panadería (1 1/2 cucharaditas de levadura seca)
Nota Importante: Para un resultado óptimo, recomendamos pesar los ingredientes con una báscula de cocina, ya que las medidas en gramos son más precisas y aseguran una masa perfecta.
Para el relleno:
- 180ml de aceite de oliva (3/4 de taza)
- 600g de cebolla (4 1/4 tazas)
- 1 pimiento rojo mediano
- 1 pimiento verde mediano
- 300g de atún o bonito del norte en conserva bien escurrido (2 tazas)
- 250g de salsa de tomate casera (1 taza)
- 1 huevo grande
- 15ml de leche (1 cucharada)
Cómo hacer empanada gallega de bonito y pimientos
Preparar el sofrito
- Corta los ingredientes: Pela y corta la cebolla en juliana. Limpia los pimientos y córtalos en trozos pequeños o en tiras, según prefieras.
- Sofríe las verduras: En una cazuela amplia, calienta el aceite a fuego medio. Añade la cebolla y los pimientos y cocina lentamente durante 20 minutos. Es importante remover de vez en cuando para evitar que las verduras se doren; deben quedar blandas y translúcidas.
- Incorpora la salsa de tomate: Agrega la salsa de tomate al sofrito y cocina durante 3-4 minutos, removiendo bien para que se mezclen los sabores.
- Añade el bonito o el atún: Escurre bien el pescado en conserva que elijas y mézclalo con el sofrito. Cocina por 2 minutos más y retira del fuego. Deja enfriar completamente antes de usarlo como relleno.
Preparar la masa
- Mezcla los ingredientes secos: En un bol grande, coloca la harina. En un lado, desmenuza la levadura fresca, y en el otro añade la sal.
- Añade los líquidos: Vierte el aceite (que has reservado del sofrito) y el agua tibia poco a poco. Mezcla con una cuchara de madera hasta integrar todos los ingredientes. Si la masa está demasiado seca, añade un poco más de agua (1-2 cucharadas).
- Amasa: Traslada la masa a una superficie limpia ligeramente enharinada y amasa durante 10-15 minutos. El objetivo es lograr una masa suave, elástica y homogénea.
- Fermentación: Forma una bola con la masa, colócala en un bol ligeramente enharinado, cúbrela con un paño húmedo y déjala reposar en un lugar cálido durante 1 hora, o hasta que doble su tamaño.
Montar y hornear la empanada
- Precalienta el horno: Ajusta el horno a 350 °F (180 °C) con calor arriba y abajo.
- Divide la masa: Una vez que la masa haya fermentado, desgasifícala presionando suavemente con los nudillos. Divídela en dos partes iguales y forma dos bolas.
- Extiende la base: Estira una de las bolas con un rodillo hasta formar un rectángulo fino y colócala sobre una bandeja de horno con papel sulfurizado.
- Coloca el relleno: Reparte el sofrito enfriado sobre la base, dejando un borde de aproximadamente 1 cm libre para el sellado.
- Cubre la empanada: Estira la otra bola de masa y úsala para cubrir el relleno. Sella los bordes doblándolos hacia adentro o presionándolos con un tenedor.
- Haz un agujero para el vapor: Con un cuchillo o unas tijeras, realiza un pequeño agujero en el centro para permitir que el vapor salga durante la cocción.
- Pincela la empanada: Bate el huevo junto con la leche y pinta la superficie de la empanada con esta mezcla para darle un color dorado brillante.
- Hornea: Introdúcela en el horno precalentado y hornea durante 45-50 minutos, o hasta que la superficie esté dorada y crujiente.
Consejos para hacer la empanada gallega perfecta
- Usa harina de fuerza para obtener una masa más elástica y firme.
- Asegúrate de que el sofrito esté completamente frío antes de montarlo sobre la masa; esto evitará que la masa se rompa.
- Si prefieres una versión más ligera, puedes reducir la cantidad de aceite del sofrito.
- Añadir un toque de pimentón dulce al sofrito puede aportar un sabor más tradicional.
Cómo servir y disfrutar la empanada gallega
- Presentación: Córtala en porciones triangulares o cuadradas para que sea más fácil de compartir.
- Guarnición: Combínala con una ensalada fresca de lechuga y tomate para un acompañamiento equilibrado.
- Acompañamiento: En invierno, puedes servirla junto con una sopa caliente.
- Maridaje: Acompaña con un vino blanco Albariño o un tinto joven para realzar los sabores.
Variantes de empanada gallega más populares
La empanada gallega es un plato versátil que se adapta a los ingredientes y tradiciones de cada región y hogar gallego. Estas son algunas de las variantes más populares:
1. Empanada de bonito
La versión clásica que combina el bonito en conserva con un sofrito de cebolla, pimientos y tomate. Su sabor equilibrado la convierte en una de las opciones favoritas en cualquier ocasión.
2. Empanada de carne
El relleno de carne de ternera o cerdo, guisada previamente con especias y verduras, es perfecto para los amantes de sabores intensos y reconfortantes.
3. Empanada de bacalao con pasas
Una mezcla tradicional que combina el bacalao desalado con pasas, cebolla y pimientos. Esta receta agridulce es un clásico en muchas zonas costeras de Galicia.
4. Empanada de zamburiñas
Considerada un manjar, esta variante incluye zamburiñas (un marisco típico gallego) con un sofrito ligero de cebolla y tomate. Es ideal para ocasiones especiales.
5. Empanada de pulpo
El pulpo, cocinado al estilo gallego con pimentón, ajo y aceite de oliva, se convierte en el protagonista de esta deliciosa empanada. Perfecta para los amantes de los sabores marinos.
6. Empanada de verduras
Para una opción más ligera, se prepara con un relleno de vegetales frescos como espinacas, acelgas, cebolla y pimientos, ideal para quienes buscan una alternativa vegetariana.
7. Empanada de lamprea
Esta variante histórica, menos común pero muy apreciada, utiliza lamprea, un pescado tradicional en Galicia, especialmente durante la temporada de Cuaresma.
8. Empanada de mejillones
Los mejillones de las rías gallegas se combinan con sofrito y especias para crear una empanada deliciosa, sencilla y representativa de la cocina marinera.
Cada una de estas versiones ofrece un homenaje a la diversidad gastronómica de Galicia, adaptándose a los gustos y los ingredientes disponibles. ¡Anímate a probarlas todas y disfruta de la riqueza de este plato tradicional!
Preguntas frecuentes sobre la empanada gallega
¿Se puede hace con masa comprada?
Sí, pero la textura y el sabor no serán iguales a los de la masa casera.
¿Cuánto tiempo dura?
Bien refrigerada, puede conservarse hasta 3 días.
¿Puedo cambiar el bonito por otro ingrediente?
Sí, prueba con pollo, mariscos o incluso solo vegetales.
Además de ser un plato emblemático de Galicia, la empanada gallega tiene un fuerte vínculo con el Camino de Santiago, ya que tradicionalmente acompañaba a los peregrinos durante su travesía. Un detalle curioso es que las empanadas originales solían incluir pescados de río, como la anguila, adaptándose a los productos locales disponibles en la época. Actualmente, la receta ha evolucionado, incorporando rellenos como el bonito, el pollo y los mariscos, pero siempre conservando su espíritu práctico y delicioso, perfecto tanto para compartir en reuniones como para llevar en un viaje.
