Los calamares a la romana son un plato típico de la cocina mediterránea, una receta de la abuela que se elabora a base de calamares fritos rebozados. Es una elaboración muy común en diversos países de la zona del mediterráneo, como España, Italia, Grecia, Turquía, entre otros. En lugares como España, es común que se sirva como un aperitivo tapa, este plato se encuentra en muchos bares y restaurantes.
Los antecedentes históricos indican que este platillo es llamado a la “romana” debido a la influencia que tenían los misioneros jesuitas romanos, al realizar sus preparaciones, ya que en los tiempos de “vigilia” (tiempos hacia la cuaresma), para pasar el ayuno o abstinencia, consumir ciertas verduras y algunos pescados, los cuales estaban rebozados y en frituras, para darle un toque lleno de más sabor y hacerlos más interesantes .
Ingredientes para 4 raciones
- 3 calamares de tamaño medio
- 1 huevo talla L
- 100g harina
- 5g de levadura química (polvo de hornear)
- aceite de oliva
- sal
Cómo hacer calamares a la romana perfectos
- En primer lugar, limpia los calamares. Separa las patas de la bolsa del calamar con mucho cuidado y retira las bolsas de tinta. Corta los calamares en aros, las patas en trozos y las aletas en tiras.
- En un bol, bate tu huevo y añade la harina, sal al gusto y la lavadura química. Mezcla bien hasta que quede una masa homogénea. Añade los calamares a la masa y remueve bien para que queden bien cubiertos.
- Calienta tu aceite de oliva en una sartén y fríe los calamares hasta que estén dorados. Escúrrelos en papel de cocina para eliminar el exceso de aceite. Sírvelos caliente.
Consejos para calamares rebozados crujientes y tiernos
- Seca bien los calamares. Un rebozado crujiente necesita una superficie seca. Seca los calamares con papel de cocina antes de pasarlos por harina.
- Fríe a temperatura alta. La temperatura ideal del aceite para freír calamares es de 175-180 ºC. Si el aceite está demasiado frío, los calamares absorberán demasiado aceite y quedarán blandos.
- Haz una masa de rebozado ligera. La masa de rebozado debe ser ligera para que quede crujiente. Para comprobarlo, introduce el dedo en la masa y comprueba que lo cubre ligeramente. Si la masa es demasiado espesa, el calamar quedará crudo. Si la masa es demasiado líquida, no cubrirá bien los calamares y estos quedarán secos.
Cómo servir y disfrutar los calamares a la romana
Se pueden servir como aperitivo, entrante o plato principal. En el caso de servirlos como aperitivo. Si se sirven como entrante, se pueden acompañar de una ensalada o de una guarnición de patatas fritas. Una de las formas más populares de disfrutarlos es con una salsa, como mayonesa casera, limón o salsa tártara.
Variantes de los calamares a la romana
En cuanto a la variante de este plato, se encuentra rebozarlos en harina de garbanzos, modificando de esta manera su textura, aplicando esta técnica suelen quedar más crujientes y obtienen un sabor más intenso. Su preparación principal es típica de frituras y rebozados del sur de España. En cuanto a las rabas de Cantabria son clasificadas por la raza del calamar, con los cuales son confeccionados. Éstos productos pueden ser los siguientes: magano, peludin o rejo, siendo el más apreciado el magano pescado a guadañeta, correspondiente al arte de pesca de forma típica con que se pescan los cefalópodos de esta raza, los cuales son de unos 12 cm de longitud. Las rabas de este tipo son denominadas como “rabas de magano” o simplemente se les conoce como “rabas blancas” .
Por supuesto, no podemos olvidarnos de los tradicionales calamares a la andaluza, otra receta de calamares fritos que no puedes dejar de probar. ¡Buen provecho!