Asar calabaza es muy sencillo y viene genial tenerla lista para usar tanto en recetas dulces como en recetas saladas con calabaza. Para ello solo debemos conservarla correctamente la calabaza una vez asada, ya que es mucho más sencillo, eficaz y económico asar calabaza en grandes cantidades que hacerlo poco a poco.

Se puede asar calabaza tal cual os vamos a explicar hoy. Si no os gusta la mantequilla podéis suprimirla, aunque a nosotros nos gusta mucho mas el resultado. También se pueden añadir aceites aromáticos, especias o hierbas frescas. De este modo queda muy bien por ejemplo para cremas. Si le añadimos especias o hierbas aromáticas debemos tener en cuenta que le dará sabor y no será tan versátil a la hora de añadirla a otras recetas.
En días sucesivos vamos publicar algunas recetas con calabaza y hemos pensado que os gustaría saber cómo asamos nosotros las calabazas que después añadimos a las recetas que os mostraremos.
Cómo asar calabaza
- En primer lugar lavamos y secamos bien las calabazas que vayamos a asar, asegurándonos que queden lo más limpias que sea posible.
- Cortamos las calabazas longitudinalmente y la ponemos en la bandeja del horno con un poco de mantequilla.
- Horneamos las calabazas a 180 con calor arriba y abajo durante 45 o 50 minutos.
- Cuando saquemos las calabas del horno las dejamos enfriar.
- Una vez frías retiramos la pie y las pepitas.
- Con la pulpa de la calabaza hacemos un puré ayudándonos de un tenedor.
Como veis asar calabaza es muy sencillo y viene genial tenerla lista para recetas como el bizcocho de calabaza, la crema de calabaza o un sencillo revuelto. Si queréis conservar la pulpa de la calabaza durante unos días podéis guardarla en un tupper de cierre hermético o un tarro de cristal muy limpio y seco. ¿Que te ha parecido este post sobre como asar calabaza?