Mejillones en escabeche

Un plato sabroso y reconfortante con mejillones y escabeche aromático. Prepáralo paso a paso y disfruta de su auténtico sabor casero.

Esta es una receta fácil y rápida, ideal para disfrutar como aperitivo, tapa o incluso como plato principal en una comida saludable. Esta receta gallega se ha transmitido de generación en generación, y su elaboración refleja la riqueza de la cocina gallega y la tradición de conservar productos del mar de alta calidad.

En Galicia, los mejillones gallegos son muy apreciados por su sabor intenso y su textura prieta. La técnica del escabeche permite prolongar su durabilidad, ofreciendo una conserva casera que supera ampliamente las opciones comerciales. Preparar mejillones escabechados es aprovechar los mejores ingredientes: aceite de oliva virgen extra, vinagre de vino, vino blanco (albariño), pimentón de la Vera, ajo y laurel.

La receta es versátil y permite que los mejillones conserven su textura y sabor natural, gracias al macerado en escabeche y la cocción al vapor inicial. Además, receta embotada caseras tienen la ventaja de mantener la calidad artesanal y ofrecer un sabor intenso que recuerda a los aperitivos gourmet de Galicia.

Con esta preparación, obtendrás una vinagreta perfecta que envuelve los mejillones en un equilibrio ideal entre acidez y aroma, logrando un plato que se puede disfrutar tanto recién hecho como tras unas horas de reposo a temperatura ambiente. Esta técnica de conserva tradicional es la base para crear tus propias conservas caseras de manera segura, usando botes herméticos y baño maría para garantizar un correcto sellado y esterilización.

Ingredientes

• 2kg de mejillones gallegos
• 240ml de aceite de oliva virgen extra (1 vaso)
• 240ml de vinagre de vino (1 vaso)
• 240ml de vino blanco albariño (1 vaso)
• 1cda de pimentón de la Vera dulce o semidulce
• 2 dientes de ajo (fileteados)
• 3 hojas de laurel

Cómo hacer mejillones en escabeche

1. Limpiar los mejillones bajo el grifo, eliminando las impurezas y retirando las barbas. Desechar los mejillones rotos o los que no se cierren al tocarlos; esto garantiza que solo uses mejillones frescos y seguros para el consumo.
2. Cocer los mejillones en una olla grande con un vaso de vino blanco (albariño es ideal) y dos hojas de laurel. Tapar y llevar a ebullición. Una vez que el agua rompa a hervir, dejar 2 minutos y retirar los mejillones a medida que se abran. Esto evita que se cocinen en exceso y se pongan gomosos.
3. Reservar el líquido de la cocción y colarlo, dejando medio vaso libre de impurezas. Separar la carne de las conchas y descartar los mejillones que no se hayan abierto. Guardar los mejillones limpios en fiambreras o frascos de cristal, dejando espacio para el escabeche.
4. Preparar el escabeche calentando aceite de oliva virgen extra con los ajos laminados y una hoja de laurel. Retirar del fuego y añadir pimentón, removiendo con cuchara de madera para que no se queme y adquiera un sabor ahumado agradable. Incorporar vinagre y el líquido de cocción reservado. Mezclar bien y dejar enfriar a temperatura ambiente.
5. Verter la vinagreta sobre los mejillones hasta que queden completamente cubiertos. Esto asegura que absorban el sabor del escabeche de manera uniforme. Dejar reposar a temperatura ambiente unas horas y luego refrigerar durante 24 horas antes de consumir; este reposo permite que los mejillones se impregnen de todos los sabores.
6. Para conservarlos a largo plazo en botes herméticos, alterna capas de mejillones con el escabeche, asegurándote de llenar bien cada frasco. Esterilizar las tapas en agua hirviendo y colocar los botes cerrados en una olla con agua que los cubra completamente. Cocer al baño maría durante 10 minutos, retirar y dejar enfriar. Secar los botes y guardarlos en un lugar limpio, seco y oscuro.
7. Al inicio, mantener los botes invertidos; a la semana darles la vuelta para garantizar que el sellado sea perfecto y prolongar la conservación.

Consejos para unos mejillones perfectos

• Consumirlos tras unas horas de reposo para intensificar el sabor.
• Guardar las conservas en recipientes de cristal bien cubiertas por el escabeche; duran hasta 5 días.
• Usar ingredientes de buena calidad: aceite de oliva virgen extra, vinagre de vino y vino blanco albariño.
• No escatimar en macerado; un buen escabeche resalta las propiedades de los mejillones y su sabor intenso.
• Mantener los botes herméticos y realizar correctamente el baño maría para garantizar la durabilidad y seguridad de la conserva.

Cómo servir y disfrutar este aperitivo

• Presentación o emplatado: Servir los mejillones en un plato llano o fuente amplia para aperitivo gourmet.
• Guarnición: Se pueden acompañar con hojas de lechuga, cebolla roja en juliana o pimientos asados.
• Acompañamiento: Pan rústico o tostadas para mojar en la vinagreta.
• Maridaje: Vino blanco albariño o rosado fresco para potenciar el sabor intenso y aromático del escabeche.

Preguntas frecuentes sobre Mejillones en escabeche

• ¿Se pueden comer recién hechos?
  Sí, aunque tras unas horas de reposo a temperatura ambiente, el sabor se intensifica y la textura prieta se mantiene.
• ¿Cuánto duran las conservas caseras de mejillones?
  Si están en botes herméticos y cubiertos por escabeche, duran meses; en recipientes de cristal, hasta 5 días en refrigeración.
• ¿Se pueden usar otros tipos de vinagre o vino?
  Sí, pero el vinagre de vino y el vino blanco albariño aportan el sabor auténtico y tradicional de la receta gallega.
• ¿Cómo asegurar la esterilización y sellado de los botes?
  Hierve las tapas y realiza un baño maría de 10 minutos. Coloca los botes invertidos hasta que se enfríen y luego dales la vuelta.
• ¿Se puede modificar el escabeche?
  Puedes ajustar la cantidad de pimentón de la Vera o el vinagre según tu gusto, pero mantener la proporción de líquido garantiza una vinagreta intensa y duradera.
• ¿Se pueden comer durante el embarazo?
  Sí, se pueden consumir durante el embarazo siempre que estén cocidos correctamente y se haya seguido el proceso de conservación seguro. Asegúrate de que los mejillones estén bien cocidos al vapor y que el escabeche haya estado refrigerado adecuadamente para evitar riesgos de bacterias.
• ¿Los mejillones escabechados engordan?
  No, son un alimento bajo en calorías y rico en proteínas y minerales, especialmente si usas aceite de oliva virgen extra de manera moderada. Son perfectos como aperitivo o como parte de una comida saludable, aportando nutrientes sin exceso de grasas.
• ¿Tienen contraindicaciones comerlos?
  En general, los mejillones gallegos son seguros para la mayoría de las personas. Sin embargo, quienes tengan alergia a los mariscos deben evitarlos. Además, es importante no consumirlos si hay dudas sobre su frescura o si el escabeche no ha sido conservado correctamente, para evitar intoxicaciones alimentarias.

La mejor temporada para preparar mejillones en conserva es de finales de verano a principios de otoño, cuando los mejillones gallegos están en su punto óptimo de sabor y tamaño.

En Galicia, los mejillones son más sabrosos y tiernos entre septiembre y abril, ya que durante los meses de desove (primavera y verano) su carne puede estar más blanda y con menos sabor intenso. Por eso, si quieres que tu receta gallega de mejillones tenga la textura prieta y el sabor intenso característicos de la cocina gallega, lo ideal es utilizar mejillones de temporada y recién recogidos.

Aprovechar los mejillones frescos no solo garantiza un plato delicioso, sino que también asegura que tu conserva de mejillones casera mantenga todas sus propiedades, logrando un producto de calidad artesanal y listo para disfrutar como aperitivo gourmet o plato versátil en cualquier ocasión.