Estas magdalenas caseras son como las de toda la vida, se hacen en un momento y resultan ideales para disfrutar de la mejor repostería casera en los desayunos y las meriendas de toda la semana. Se pueden comer tal cual o rellenarlas de chocolate o de vuestra mermelada favorita.
Si las guardáis en un recipiente con cierre hermético, aguantan perfectas entre siete y diez días, con lo cual son perfectas para tener siempre listo un dulce casero del que poder disfrutar en cualquier momento. Si sois más de chocolate os recomiendo que probéis mis madalenas de chocolate, también son muy sencillas y quedan exquisitas.
Ingredientes
- 3 huevos
- 1 pizca de sal
- 250gr de azúcar
- 350gr de harina
- 1 sobre de levadura de repostería
- 250cc de aceite de oliva de baja graduación
- 125cc de leche
- la ralladura de un limón
Magdalenas caseras elaboración
- Mezclamos en un bol las tres claras de huevo y la pizca de sal. Batimos hasta que las claras estén a punto de nieve.
- Añadimos las yemas, el azúcar, el aceite, la leche, la ralladura de limón, la levadura y mezclamos todo bien con movimientos suaves y envolventes.
- Incorporamos, poco a poco, la harina tamizada hasta que este completamente integrada.
- Cuando la masa quede bien mezclada y tenga una textura homogénea, rellenamos los moldes de papel hasta media altura mas o menos.
- Espolvoreamos con un poco de azúcar y metemos las magdalenas caseras en el horno. Las horneamos a 180 grados y durante 20 o 25 minutos, esto dependerá un poco de cada horno.
- En cualquier caso lo mejor es sacarlas cuando observemos que las magdalenas están doradas, las dejamos enfriar durante 10 minutos en la misma bandeja de horno para que no se nos rompan.
- Una vez que estén templadas las sacamos sobre una rejilla y las dejamos enfriar por completo. Y ya tenemos unas deliciosas magdalenas caseras listas para servir.