
Macarrones con queso: cremosos, irresistibles y fáciles. Prepáralos paso a paso y disfruta el clásico que nunca falla.
Prepara esta receta de macarrones cualquier día de la semana, ya sea como plato único o como guarnición. Puedes servirlos como cena rápida o como parte de un menú más elaborado. Gracias a su versatilidad, combina genial con ensaladas, verduras o carnes, y es una opción excelente para llevar en Tupper.
El origen de los «mac and cheese» se remonta a Europa, pero fueron los estadounidenses quienes popularizaron esta receta de pasta hasta convertirla en uno de los platos más icónicos de su gastronomía. Thomas Jefferson introdujo esta combinación de pasta con queso en EE. UU. a finales del siglo XVIII, y desde entonces, no ha dejado de reinventarse con ingredientes como queso y leche, beicon, tomate o distintos tipos de pasta.
Encuentra todos los ingredientes fácilmente en supermercados como Mercadona y adapta la receta a tu gusto o necesidades: puedes hacer una versión sin horno, una receta con queso feta y cherrys o incluso una receta de macarrones con queso para niños con formas divertidas. Es perfecta también si buscas una receta rápida y reconfortante que guste a toda la familia.
Ingredientes para 4 raciones
- 250g de pasta seca (coditos)
- 100g de queso cheddar rallado (1 taza)
- 100g de queso mozzarella rallado (1 taza)
- 30g de queso parmesano en polvo (¼ taza)
- 20g de mantequilla (1 cda)
- 20g de harina de trigo (2 cda)
- 600ml de leche (2½ tazas)
- Pimienta negra recién molida (al gusto)
- Nuez moscada (al gusto)
- Ajo en polvo (al gusto)
Cómo hacer macarrones con queso
- Cocina la pasta en abundante agua hirviendo con sal y sigue el tiempo indicado por el fabricante. Escúrrela bien y resérvala.
- Funde la mantequilla en una olla a fuego medio. Cuando esté completamente derretida, añade la harina y remueve constantemente hasta formar una pasta suave. Cócinala un par de minutos.
- Incorpora la leche poco a poco sin dejar de mezclar. Cocina hasta obtener una bechamel ligera y sin grumos.
- Añade las especias al gusto: pimienta, nuez moscada y ajo en polvo. Mezcla bien.
- Incorpora el queso: primero la mitad del mozzarella y del cheddar, remueve hasta que se fundan, y después añade el parmesano. Obtén una salsa cremosa y uniforme.
- Mezcla la pasta con la salsa de queso y viértela en una fuente de horno. Cubre con el resto de los quesos y gratina a 180 °C (356 °F) durante 10 minutos o hasta que se forme una costra dorada.
Consejos para hacer mac and cheese perfectos
- Usa pasta corta: tipo coditos o macarrones, para que absorban bien la salsa.
- Cocina al dente: así no se pasan al hornear.
- Combina quesos: el cheddar da intensidad, la mozzarella elasticidad y el parmesano profundidad, pero puedes usar cualquier queso de tu preferencia, siempre que funda bien.
- Cuida la bechamel: debe ser ligera para no restar protagonismo al queso. Si es necesario puedes añadir mas leche.
- Sal con moderación: los quesos ya aportan bastante sal, tenlo en cuneta.
- Gratina bien: logra una textura irresistible.
Cómo servir y disfrutar tus macarrones con queso
- Presentación o emplatado: Sirve caliente en cazuelas individuales o fuentes grandes para compartir.
- Guarnición: Añade cebollino fresco o un toque de trufa rallada.
- Acompañamiento: Ideal con ensalada verde, pan de ajo o brócoli al vapor.
- Maridaje: Vino blanco seco, limonada casera o cerveza tipo lager.
Variantes y adaptaciones
- Al horno: clásica y con una costra crujiente irresistible.
- Sin horno: Calienta la mezcla final en una sartén grande hasta que se funda todo.
- Con queso feta y cherrys: hornea junto a los tomates y desmenuza el feta al servir.
- Con queso azul: añade una pequeña cantidad a la salsa para un sabor más profundo.
- Con queso y tomate: añade concentrado de tomate a la bechamel o acompaña con salsa de tomate casera.
- Receta de mac and cheese estilo americano: con cheddar predominante, leche evaporada y un toque de mostaza.
- Para niños: usa pastas divertidas y quesos suaves.
Preguntas frecuentes sobre esta receta
- ¿Qué tipo de queso es mejor para esta receta?
El cheddar es el más usado por su sabor y color, pero con esta mezcla quedan deliciosos y además, puedes añadirlo a la receta si lo deseas. - ¿Cómo evitar que la salsa quede grumosa?
Añade la leche poco a poco y remueve sin parar hasta que la mezcla esté homogénea. - ¿Puedo usar otro tipo de pasta?
Sí, pero elige variedades cortas con buena capacidad para retener salsa, como fusilli o penne. - ¿Qué hago si no tengo horno?
Saltea la mezcla final en una sartén grande y cubre con queso rallado hasta que se funda.