
La sopa de verduras de la abuela es uno de los platos más antiguos y versátiles del mundo. Su origen se remonta a la antigüedad, cuando las civilizaciones comenzaron a cocer vegetales en agua para aprovechar sus nutrientes al máximo. Con el paso del tiempo, cada región ha adaptado esta receta básica a sus ingredientes locales, desde las sopas mediterráneas con un toque de aceite de oliva hasta las versiones asiáticas enriquecidas con especias.
Esta receta, además de ser un clásico reconfortante, es una opción nutritiva que destaca por su alto contenido en fibra, vitaminas y antioxidantes. Los vegetales como la zanahoria, el repollo y el puerro aportan beneficios para la salud digestiva, fortalecen el sistema inmunológico y son ideales para mantener una dieta equilibrada. Por si fuera poco, puedes adaptarla fácilmente con las verduras que tengas en casa, convirtiéndola en una receta de aprovechamiento perfecta.
Preparar sopa casera de verduras no solo es más saludable que recurrir a productos procesados, sino que también te permite controlar la cantidad de sal y grasas añadidas. Además, es una solución excelente para aquellos días en los que buscas algo rápido, económico y reconfortante.
Ingredientes para 4 personas
- 125g de repollo
- 2 zanahorias(+/- 150g)
- 2 tomates (+/- 150g)
- 1 puerro (+/- 125g)
- 3 dientes de ajo
- 1,5l de caldo de pollo(1500ml)
- aceite de oliva
- sal(al gusto)
- pimienta(al gusto)
Cómo hacer sopa de verduras casera
- Prepara las verduras: Pica en dados pequeños la cebolla, el ajo, la col, las zanahorias y el tomate. Corta el puerro en rodajas finas.
- Sofríe las verduras: Calienta aceite de oliva en una olla a fuego medio y añade los ajos. Remueve y, cuando empiecen a dorarse, incorpora la cebolla y el puerro. Cocina hasta que estén transparentes. Si quieres una sopa más ligera, puedes saltarte este paso.
- Añade los tomates: Incorpora los tomates picados y cocina durante 5 minutos para que liberen sus jugos.
- Integra el resto de las verduras: Agrega la zanahoria y el repollo. Cocina durante 2 minutos antes de verter el caldo caliente.
- Cocina la sopa: Lleva la mezcla a ebullición, tapa la olla y cocina a fuego medio durante 20 minutos. Rectifica de sal y pimienta antes de servir.
Consejos para hacer la sopa con verduras perfecta
- Usa verduras de temporada: Con este sencillo consejo conseguirás que tu sopa casera con verduras de temporada sea económica.
- Varía el caldo: Puedes usar caldo de carne, pollo o simplemente agua con algún caldo concentrado.
- Añade proteínas: Incorpora huevo duro picado, pollo desmenuzado o tofu para un plato más completo.
- Ajusta la textura: Si prefieres una sopa más cremosa, puedes triturar parte de las verduras antes de servir.
- Para una sopa más ligera: Cocina las verduras directamente en el caldo en lugar de sofreírlas. Así conservarás su frescura y reducirás las grasas.
- Para una sopa más contundente: Añade fideos como cabellín, udon o noodles para conseguir un plato más completo y saciante.
Cómo servir y disfrutar la sopa de verduras casera
- Presentación o emplatado: Sirve la sopa en un cuenco hondo, decorada con perejil fresco picado.
- Guarnición: Añade un toque de textura y sabor a la sopa con picatostes o crutones crujientes. Son ideales para mezclar directamente en el plato antes de servir.
- Acompañamiento: Complementa la sopa con pan integral recién horneado o una ensalada fresca y ligera que contraste con el plato caliente.
- Maridaje: Combina con un vino blanco seco o agua si prefieres una opción sin alcohol.
Preguntas frecuentes sobre la sopa de vegetales
¿Puedo congelar la sopa con verduras?
Sí, la sopa se congela perfectamente en recipientes herméticos. Consúmela en un plazo de 3 meses para mantener su sabor y textura.
¿Cómo espesar esta receta de sopa rápida?
Tritura una parte de las verduras cocidas y mezcla con el caldo. También puedes añadir un poco de patata o almidón de maíz.
¿Qué verduras son las más adecuadas para hacer sopa caliente?
La mayoría de las verduras funcionan muy bien, ya sean frescas, congeladas o en conserva. Algunas de las más populares incluyen zanahoria, apio, cebolla, calabacín, patata y espinacas. Puedes adaptarla a lo que tengas en casa o a las verduras de temporada.
¿Puedo usar verduras congeladas o en conserva?
¡Por supuesto! Tanto las congeladas como las enlatadas son opciones prácticas y conservan gran parte de sus nutrientes. Solo asegúrate de escurrir bien las enlatadas si contienen sal o conservantes.
¿Qué especias y hierbas aportan mejor sabor a la sopa?
Hierbas como el laurel, el tomillo y el orégano, junto con especias como el comino, realzan el sabor de la sopa. Si te gusta experimentar, prueba con un toque de cúrcuma o jengibre para añadir un giro especial.
¿Puedo añadir legumbres a la sopa?
Sí, las legumbres como lentejas, garbanzos o alubias son una excelente adición. Aportan proteínas, fibra y convierten la sopa en un plato más completo y saciante.
¿Es apta para veganos o vegetarianos?
Si utilizas caldo de verduras y no añades ingredientes de origen animal, como carne o caldo de pollo, la sopa será completamente apta para veganos y vegetarianos.
¿Puedo hacer sopa en olla a presión?
Sí, la olla a presión es ideal para acelerar el proceso. Solo necesitarás unos 10-15 minutos, dependiendo del tamaño de los trozos de verdura.
¿Ayuda a perder peso?
Si no sofríes las verduras y las cocinas en crudo, Es un plato bajo en calorías, rico en fibra y muy saciante, lo que lo convierte en una excelente opción para dietas de control de peso.
¿La sopa a base de es buena para la digestión?
Las verduras aportan fibra, vitaminas y minerales que favorecen una digestión saludable. Además, es un plato ligero que no sobrecarga el estómago.
¿Cómo puedo darle un toque diferente a mi sopa de vegetales?
Prueba a añadir un chorrito de leche de coco, un toque de salsa de soja, o incluso un poco de curry para darle un perfil de sabor único. También puedes incluir guarniciones como semillas de sésamo, frutos secos picados o queso rallado.
Las posibilidades al preparar este plato casero son infinitas, ya que puedes adaptarlo a tus gustos, necesidades dietéticas o incluso a lo que tengas disponible en casa. Experimentar con diferentes combinaciones de vegetales, especias y texturas no solo enriquece su sabor, sino que también potencia su valor nutricional. Si buscas una opción ligera, reconfortante y versátil, esta preparación es ideal para cualquier momento del año, permitiéndote disfrutar de una comida saludable y llena de energía en cada cucharada.