
Prepara este delicioso pollo con cerveza en olla, una receta tradicional que combina ingredientes sencillos con todo el sabor de la cocina casera.
Esta receta de pollo fácil y rápido es perfecta para cualquier día de la semana, pero también se luce en comidas especiales. El pollo queda tierno, jugoso y lleno de aromas gracias a una cocción lenta en cerveza rubia y un sofrito bien trabajado. Ideal para quienes buscan platos completos, sin complicaciones y llenos de sabor.
Este plato tiene raíces en la cocina europea, especialmente en Francia y España, donde la cerveza se utiliza desde hace siglos para potenciar sabores en guisos. Aunque no hay un creador concreto, su popularidad ha crecido gracias a cocineros reconocidos como Arguiñano, que han sabido rescatar esta receta en versiones modernas sin perder su esencia. Tradicionalmente, se cocinaba con ingredientes de temporada y en olla, como en esta versión, aunque también existen variantes elaboradas al horno.
Es un plato que puedes servir como comida principal, tanto en almuerzos como en cenas. La clave está en el equilibrio de sabores y en aprovechar bien la salsa. Añade un buen pan o unas patatas asadas y tendrás un auténtico manjar para disfrutar sin prisas. Además, puedes preparar esta receta con antelación y calentarla antes de servir; de hecho, muchos dicen que está aún más sabrosa al día siguiente.
Si quieres conocer todos los trucos y el paso a paso, sigue leyendo y descubre cómo hacer pollo con cerveza y cebolla de forma clara y sin perderte ningún detalle.
Ingredientes para 4 personas
- 500g de pechuga de pollo troceada (2 grandes)
- 150g de zanahoria (1 grande)
- 200g de cebolla (1 grande)
- 2 dientes de ajo
- 50g de aceite de oliva virgen extra (5 cda)
- 1 hoja de laurel
- 2 clavos de olor
- 15g de harina de trigo (1 cda)
- 500ml de cerveza rubia (2 tazas)
- 20g de tomate frito (1 cda)
- Sal al gusto
- Pimienta al gusto
Cómo hacer pollo con cerveza paso a paso
- Corta la pechuga en trozos de bocado y salpimienta al gusto.
- Pica la cebolla en brunoise, pela y lamina los ajos, y corta la zanahoria en rodajas finas.
- Calienta el aceite en una olla a fuego medio. Cuando esté caliente, añade el pollo y dóralo hasta que esté bien sellado. Retíralo y resérvalo.
- Añade el ajo, la cebolla, los clavos y el laurel. Sofríe a fuego medio-bajo durante 15 minutos.
- Incorpora la zanahoria y continúa cocinando 10 minutos más para que suelte su dulzor.
- Agrega la harina, remueve bien y cocina un par de minutos hasta que tome color.
- Devuelve el pollo a la olla, incorpora la cerveza y sube el fuego. Cocina durante 15 minutos, removiendo de vez en cuando.
- Incorpora el tomate frito al final de la cocción y mezcla bien para integrar todos los sabores.
Consejos para que quede perfecto
- Usa cerveza rubia si prefieres un sabor más suave y ligero. Si quieres un toque más amargo e intenso, opta por una cerveza negra.
- Puedes utilizar cualquier pieza de pollo, pero lo fundamental es que los trozos tengan un tamaño adecuado, evitando que sean demasiado grandes para garantizar una cocción uniforme y bien lograda.
- No escatimes en la cocción lenta, ya que es la clave para que el pollo quede tierno y jugoso.
- Añade hierbas frescas como tomillo o romero al final si te gusta un toque aromático extra.
- Reposa el guiso unos minutos antes de servir para que los sabores se asienten mejor.
Cómo servir y disfrutar el pollo con cerveza
- Presentación o emplatado: Coloca el pollo en el centro del plato con la salsa bien repartida y decora con un poco de perejil fresco.
- Guarnición: Acompaña con puré de patatas, papas fritas, arroz blanco o una mezcla de verduras al vapor.
- Acompañamiento: Sirve con pan rústico para aprovechar la salsa hasta la última gota.
- Maridaje: Combina con la misma cerveza usada en la cocción o un vino blanco seco.
Variantes de esta receta de pollo
- Con champiñones: Añade 150g de champiñones laminados en el sofrito, justo después de la cebolla. Aportan textura y un sabor umami delicioso.
- Con manzana: Incorpora 1 manzana cortada en cubos durante los últimos 10 minutos de cocción. Su dulzor contrasta con la cerveza y suaviza el plato.
- Con cerveza negra: Sustituye la cerveza rubia por negra. El resultado será más intenso y con matices tostados.
- Con miel: Agrega 1 cda de miel junto al tomate. Le dará un acabado brillante y un toque caramelizado que equilibra la acidez.
Preguntas frecuentes
- ¿Puedo usar muslos en vez de pechuga?
Sí, incluso quedan más jugosos. Ajusta el tiempo de cocción si usas piezas con hueso. - ¿Qué tipo de cerveza es mejor?
Una lager suave va genial, pero también puedes experimentar con cervezas tostadas o negras para intensificar el sabor. - ¿Se puede hacer con antelación?
Sí, de hecho, mejora tras unas horas o de un día para otro. Solo recalienta suavemente antes de servir. - ¿Puedo congelarlo?
Sí, congélalo sin problema una vez frío. Aguanta bien hasta tres meses. - ¿Es apta para niños?
Sí, el alcohol se evapora durante la cocción. Asegúrate de que hierva el tiempo suficiente.