La Mozzarella en carroza es un clásico de la cocina italiana que destaca por su sencillez y su sabor irresistible. Esta receta consiste en un sándwich crujiente de pan relleno con queso mozzarella derretido, rebozado y frito hasta obtener un dorado perfecto. Se trata de un plato ideal para servir como aperitivo, entrante o incluso una cena rápida y reconfortante.
Su origen se remonta al sur de Italia, especialmente en las regiones de Campania y Lazio, donde se preparaba como una forma de aprovechar el pan duro y el queso mozzarella fresco. Su nombre, que significa «mozzarella en carruaje», hace referencia a cómo el queso fundido queda envuelto dentro del pan, como si viajara en un cochecito de masa dorada y crujiente.
Aunque tradicionalmente se sirve sola o con salsa marinara, hoy en día existen variantes que incluyen jamón, anchoas o incluso trufa para darle un toque más sofisticado. En esta receta te enseñamos cómo hacer la versión clásica y algunos trucos para lograr una textura perfecta y un queso derretido en su punto justo.
Acompáñame a descubrir todos los secretos de esta delicia italiana y aprende cómo hacer Mozzarella in carrozza en casa con ingredientes sencillos y pasos fáciles de seguir.
Ingredientes
- 8 rebanadas de pan de molde (preferiblemente un poco duro)
- 250g de queso mozzarella fresco, en rebanadas gruesas
- 2 huevos grandes
- 1/2 taza de leche
- 1/4 taza de harina de trigo
- Sal (al gusto)
- Pimienta (al gusto)
- Aceite de oliva para freír
- Perejil fresco picado para decorar
- Salsa marinara para acompañar
Cómo hacer Mozzarella en carroza
- Preparar los sándwiches: Retira la corteza de las rebanadas de pan.
- Coloca una rebanada de mozzarella entre dos rebanadas de pan para formar sándwiches.
- Preparar la mezcla para rebozar: En un bol, bate los huevos con la leche, la harina, la sal y la pimienta hasta obtener una mezcla homogénea.
- Rebozar y freír: Sumerge cada sándwich en la mezcla de huevo, asegurándote de que se impregne bien por todos lados.
- Calienta aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio.
- Fríe los sándwiches hasta que estén dorados y crujientes por ambos lados (2-3 minutos por lado).
- Retira y colócalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
- Servir: Corta los sándwiches por la mitad en diagonal.
- Decora con perejil fresco picado.
- Sirve con salsa marinara caliente para mojar.
Consejos para hacer Mozzarella en carroza perfecta
- Usa pan ligeramente duro para evitar que se desmorone con la mezcla de huevo.
- Escurre bien la mozzarella para evitar que suelte agua al freír.
- Si quieres que el queso quede aún más fundido, hornea los sándwiches fritos unos minutos antes de servir.
- Añade un toque de ajo en polvo o hierbas italianas a la mezcla de huevo para potenciar el sabor.
Cómo servir y disfrutar Mozzarella en carroza
- Presentación o emplatado: Sirve los sándwiches en una tabla de madera con un toque de perejil fresco.
- Guarnición: Acompaña con una ensalada de rúcula y tomates cherry para equilibrar la textura crujiente del pan frito.
- Acompañamiento: La salsa marinara es la opción tradicional, pero también puedes probar con una salsa de pesto o alioli.
- Maridaje: Un vino blanco seco como un Vermentino o un tinto ligero como un Chianti complementan bien el plato.
Preguntas frecuentes sobre Mozzarella en carroza
¿Se puede hacer Mozzarella en carroza sin freír?
Sí, puedes hornearla a 200°C durante 15 minutos o cocinarla en una freidora de aire a 180°C durante 10 minutos para una versión más ligera.
¿Qué tipo de pan es mejor para esta receta?
El pan de molde ligeramente seco es ideal, pero también puedes usar pan rústico o pan de chapata.
¿Puedo hacer Mozzarella en carroza con otro tipo de queso?
Sí, aunque la receta clásica lleva mozzarella, también puedes usar provolone, scamorza o un queso tierno con buena capacidad de fusión.
¿Cuánto tiempo se conserva Mozzarella en carroza?
Se recomienda comerla recién hecha, pero puedes guardarla en la nevera hasta 24 horas y recalentarla en el horno.
Este plato es un ejemplo perfecto de cómo un puñado de ingredientes sencillos pueden transformarse en una delicia crujiente y reconfortante. Prepararla en casa te permitirá disfrutar de su sabor auténtico y sorprender a tus invitados con un clásico italiano irresistible. ¡Anímate a probarla y a experimentar con diferentes rellenos para darle tu toque personal!