
Cómo hacer un sofrito casero perfecto. Un buen sofrito es la base de multitud de platos. Un buen sofrito puede hacer que un plato sencillo se convierta en el más rico de los manjares o llevarnos al fracaso mas estrepitoso en cuestion de segundos. Lo bueno es que hacer un sofrito rico y con fundamento es algo relativamente sencillo si tenemos en cuenta algunos trucos y consejos muy básicos. Si estás comenzando en la cocina este post es de obligada lectura, ya que sabiendo cómo hacer sofritos sencillos y ricos puede salvarte en más de una ocasión.
Hay platos deliciosos que parten de un sencillo, pero riquísimo sofrito. Platos que todos conocemos y que nos encantan como por ejemplo una paella, carrilleras en salsa, albóndigas, etc… Tanto es así que muchas veces, si disponemos de un sofrito casero preparado para usar tenemos la posibilidad de hacer mil platos diferentes. Así es que si os apetece saber cómo hacer un sofrito casero perfecto no podeis perderos este articulo.
Cómo hacer un sofrito casero 10
- El aceite es una de las cuestiones más importantes a la hora de hacer un buen sofrito. Queda terminantemente prohibido reutilizar aceite para hacer sofritos. Siempre que hagamos este tipo de elaboraciones debemos partir de aceite crudo. A la hora de elegir un aceite para hacer sofritos caseros os recomiendo que os decantais por aceite de oliva. No es necesario que sea un aceite de oliva virgen extra. Pero siempre es mejor un aceite de oliva común que cualquier otro tipo de aceite como por ejemplo el aceite de girasol.
- Las especias son importantes pero no imprescindibles. Es muy importante tener en cuenta que vamos a usar distintas verduras. Y que todas ellas aportan algo y formarán en conjunto un sabor delicioso quesera lo que defina nuestro sofrito, así es que necesita de pocos aditivos. Hay recetas como puede ser un pollo korma que requieren de multitud de especias, pero esta no suele ser la norma general a la hora de cocinar. Es crucial elegir la especie correcta y no abusar de ella.
- Los ingredientes y la calidad de los mismos es lo que hará de nuestro sofrito casero toda una experiencia para el paladar determinando la calidad de nuestros guisos. Por lo que conviene elegir bien los ingredientes, que sean frescos y de la mejor calidad que podamos adquirir.
- Un buen corte es otra cuestión importante que debemos tener en cuenta. Para hacer un sofrito casero rico lo ideal es picar todas las verduras del mismo tamaño. También podemos hacerlo en el procesador de alimentos. Aunque personalmente me gusta mucho mas como quedan las verduras cortadas a cuchillo.
- La potencia del fuego es otra de esas cosas importantes que podemos descuidar ni dejar al azar. Un buen sofrito casero se hace a fuego lento, sin prisas y teniendo claro que nuestro mayor enemigo son las prisas y el mejor aliado la paciencia. Dedicarle un poquito más de tiempo a un sofrito puede marcar una gran diferencia en el resultado final.
- La dureza de los ingredientes es lo que debemos tener en cuenta para saber en qué momento incorporar cada elemento al sofrito. Generalmente agregaremos la cebolla, a continuación los ajos. Después, dependiendo de lo que usemos para nuestro sofrito iremos agregando primero los ingredientes que necesiten más tiempo de cocción. No vale agregar los ingredientes a lo loco.
- Debemos remover con cierta frecuencia para evitar que se nos quemen los ingredientes y se arruine la elaboración. Esto nos permitirá observar si nuestro sofrito necesita un poco más de aceite o quizás menos fuego.
- Los tomates ideales para un buen sofrito son los tomates naturales. Aunque no siempre es posible disponer de ellos. Pero si esto no es posible lo mejor es usar tomate envasado entero. Revisar bien cada uno de los tomates, retirarles el pedículo y si tuvieran alguna parte afectada o fea quitarla.