
¿Buscas la receta de nata montada casera perfecta? Descubre cómo hacer nata montada (o crema Chantilly) de manera fácil, rápida y con ingredientes naturales. Ideal para postres, rellenos, coberturas y bebidas. ¡Lista en minutos de trabajo activo y mucho más sabrosa que la versión industrial!
Sigue este paso a paso y consigue una nata montada suave, esponjosa y perfectamente firme que encantará a todos. Esta receta es muy sencilla, se prepara en menos de 15 minutos de trabajo activo (más el tiempo de refrigeración) y puedes adaptarla según tus gustos.
La nata montada es un clásico de la repostería clásica europea y ha conquistado paladares en todo el mundo por su increíble versatilidad y su textura cremosa. Aunque puedes encontrarla en supermercados, nada supera el sabor de una receta casera, hecha con mimo y sin aditivos.
Preparar tu propia nata montada te permite controlar la calidad de los ingredientes, ajustar el dulzor y personalizar el resultado a tu gusto. Además, es perfecta para tartas de cumpleaños, postres para reuniones o simplemente para acompañar fruta fresca.
Puedes hacer esta receta con batidora eléctrica para un resultado rápido o de forma tradicional a mano con unas varillas. Si te gusta experimentar, prueba también a aromatizarla con vainilla, cacao o tu licor favorito.
Nata para montar ingredientes para 500ml
- 250g de mantequilla sin sal
- 250ml de leche (1 taza )
Para montar
- 60-80g de azúcar (opcional)
Cómo hacer nata montada casera paso a paso
- En un cazo, derrite a fuego bajo los trozos de mantequilla junto con la leche. Remueve constantemente y retira del fuego justo cuando la mantequilla se haya fundido por completo. ¡Es muy importante que no llegue a hervir!
- Emulsionar: Vierte la mezcla en un recipiente alto y bate con una batidora de brazo (minipimer) durante 1 minuto a velocidad baja. Este paso es crucial para unir la grasa y el líquido, evitando que se separen después.
- Deja que la mezcla se enfríe a temperatura ambiente.
- Después, pásala a un recipiente hermético y refrigérala un mínimo de 8 horas, aunque lo ideal es dejarla de un día para otro.
- Un truco profesional es meter el bol y las varillas de la batidora en el congelador 15 minutos antes de empezar. El frío es tu mejor aliado.
- Vierte la nata casera (que debe estar muy fría) en el bol helado. Comienza a batir a velocidad media.
- Cuando la nata empiece a espesar y las varillas dejen surcos, añade el azúcar glas y la vainilla (si la usas) sin dejar de batir.
- Aumenta la velocidad a media-alta y sigue batiendo hasta que la nata forme picos firmes y estables. Sabrás que está lista si puedes voltear el bol y no se cae. ¡Ten cuidado de no batir de más!
Consejos para montar nata casera perfecta
- Este es el truco más importante. La nata, el bol y las varillas deben estar muy fríos. Si tu cocina es cálida, puedes colocar el bol sobre otro recipiente con hielo mientras bates.
- Si bates demasiado, la nata se volverá granulosa. ¡No la tires! Añade una cucharada de nata líquida fría y mezcla suavemente con una espátula para intentar recuperarla. Si no funciona, sigue batiendo hasta que se separe por completo y obtendrás mantequilla casera y suero de leche (buttermilk).
- Cuando la nata esté semimontada, puedes añadir una cucharadita de cacao en polvo, ralladura de limón o naranja, o un chorrito de tu licor preferido (ron, Cointreau) para darle un toque especial.
Cómo servir y disfrutar la nata montada
- Presentación: Sírvela usando una manga pastelera con una boquilla rizada para decorar tartas, cupcakes o cafés de forma elegante.
- Guarnición: Es perfecta para acompañar fruta fresca (fresas, frambuesas), tortitas, gofres o un trozo de bizcocho de chocolate.
- Acompañamiento: Es el toque final para un chocolate caliente, un café irlandés o un batido cremoso.
- Maridaje: Combina de maravilla con bebidas como café, té negro o un vino dulce tipo Moscatel.
Cómo conservar la nata montada: duración y trucos
- En el refrigerador: Guárdala en un recipiente hermético en la parte más fría de la nevera. Consúmela en un plazo de 2-3 días.
- Recalentado adecuado: No se recalienta. Se sirve siempre fría.
- ¿Se puede congelar?: Sí. Puedes congelar la nata ya montada en porciones (por ejemplo, usando una manga pastelera sobre papel de horno). Una vez congeladas, guárdalas en una bolsa hermética. Duran hasta 3 meses y son perfectas para añadir directamente a bebidas calientes.
- ¿Se puede consumir frío?: Sí, de hecho, siempre se debe consumir fría para mantener su textura.
Preguntas Frecuentes sobre cómo hacer nata montada
- ¿Puedo usar nata para cocinar en lugar de nata para montar?
No. La nata para cocinar tiene un contenido graso bajo (15-18%) y no tiene la capacidad de incorporar aire para montar. Necesitas una nata con un mínimo de 35% de materia grasa. - ¿Cómo consigo una textura más firme y estable?
El frío es clave. Además, asegúrate de no añadir el azúcar al principio, sino cuando ya esté espesando. Para una estabilidad extra (ideal para tartas que estarán tiempo fuera de la nevera), puedes añadir un estabilizante como una cucharada de queso crema o gelatina neutra en polvo. - ¿Se puede hacer sin batidora eléctrica?
Sí, se puede hacer a mano con unas buenas varillas de globo. Requiere más tiempo y esfuerzo, pero el resultado es igual de bueno. Asegúrate de hacer movimientos rápidos y envolventes para incorporar aire. - ¿Es apto para intolerantes a la lactosa?
Puedes intentarlo usando leche y mantequilla sin lactosa. La textura puede variar ligeramente, pero es una alternativa viable. - ¿Listo para disfrutar de una auténtica nata montada casera? Sigue la receta y cuéntame en los comentarios cómo te ha quedado. ¡Buen provecho
