
El bizcocho de nata es una de las recetas más sencillas y deliciosas que puedes preparar en casa. Su textura esponjosa y su sabor suave lo convierten en la opción perfecta para desayunos, meriendas o como base para tartas caseras. Con pocos ingredientes y en poco tiempo, conseguirás un bizcocho tierno y jugoso que se convertirá en uno de tus favoritos.
Pero, ¿sabías que este bizcocho tiene una larga historia? Aunque no hay una fecha exacta de su origen, el uso de nata en la repostería se remonta a siglos atrás, cuando se aprovechaba la crema de la leche para elaborar postres suaves y esponjosos. Hoy en día, esta receta sigue siendo un clásico en muchas cocinas, ya que es versátil y combina a la perfección con ingredientes como frutas, chocolate o frutos secos.
Si buscas una receta fácil y rápida, este bizcocho de nata casero es ideal para ti. Sigue los pasos y disfruta de un bizcocho perfecto para cualquier ocasión.
Ingredientes para el bizcocho de nata
- 4 huevos (talla M)
- 350g de azúcar (1 y 3/4 tazas)
- 340g de harina de repostería (2 y 3/4 tazas)
- 12g de levadura química o polvos de hornear (1 cda)
- 250ml de nata para montar (1 taza)
- 1cdita de esencia de vainilla
Cómo hacer bizcocho de nata
- Precalienta el horno a 180ºC (350ºF).
- Bate los huevos con el azúcar hasta obtener una mezcla espumosa y con volumen. Usa varillas eléctricas para mejores resultados.
- Bate ligeramente la nata en otro bol, sin llegar a montarla por completo.
- Incorpora la nata en hilo a la mezcla de huevos y azúcar mientras sigues batiendo. Añade la esencia de vainilla y mezcla bien.
- Tamiza la harina con la levadura y agrégalas poco a poco a la mezcla. Usa una espátula y movimientos envolventes para no perder el aire incorporado.
- Engrasa un molde con mantequilla o fórralo con papel de horno.
- Vierte la masa en el molde y espolvorea un poco de azúcar por encima.
- Hornea durante 30-40 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro, este salga limpio.
- Saca del horno, deja enfriar y desmolda.
Consejos para hacer un bizcocho de nata perfecto
- Usa nata para montar con al menos un 35% de materia grasa para obtener un bizcocho más jugoso.
- No batas en exceso la nata para evitar que se corte o se separe la grasa.
- Tamiza la harina y la levadura para lograr una textura más ligera y esponjosa.
- No abras el horno antes de los 30 minutos para evitar que el bizcocho se hunda.
- Si quieres un bizcocho aún más aromático, añade ralladura de limón o naranja a la masa.
Cómo servir y disfrutar el bizcocho de nata
- Presentación o emplatado: Sirve el bizcocho en porciones individuales o en su forma original, espolvoreado con azúcar glas.
- Guarnición: Acompáñalo con frutas frescas como fresas, plátano o frutos rojos para darle un toque extra de sabor.
- Acompañamiento: Disfrútalo con una taza de café, té o un vaso de leche fría.
- Maridaje: Si lo sirves como postre en una comida especial, acompáñalo con un vino dulce o un licor suave.
Preguntas frecuentes sobre el bizcocho de nata
¿Se puede hacer el bizcocho con nata sin gluten?
Sí, puedes sustituir la harina de repostería por una mezcla de harinas sin gluten, como harina de arroz y almendra.
¿Cuánto tiempo dura el bizcocho de crema para montar?
Si lo guardas en un recipiente hermético, se mantiene fresco durante 3-4 días a temperatura ambiente.
¿Puedo congelarlo?
Sí, envuelve las porciones en film transparente y guárdalas en el congelador hasta por 3 meses. Para descongelar, deja a temperatura ambiente unas horas antes de consumir.
¿Se puede hacer sin azúcar?
Puedes sustituir el azúcar por edulcorantes aptos para horneado, como eritritol o xilitol.
El bizcocho de nata es una de las recetas más versátiles y apreciadas en la repostería casera. Perfecto para cualquier ocasión, ya sea un desayuno familiar, una merienda con amigos o como base para una tarta de cumpleaños. Su textura esponjosa y su delicioso sabor lo convierten en un éxito asegurado. Con la ayuda de la Thermomix, preparar un bizcocho de nata y yogur es muy sencillo y rápido. La versión de la abuela, que combina nata y mantequilla, siempre evoca recuerdos de la infancia. Si eres amante del chocolate, no puedes dejar de probar el bizcocho de nata y chocolate, que es una delicia irresistible. También hay opciones caseras como el bizcocho de nata y limón, que aporta un toque cítrico y refrescante. Además, es una receta versátil que permite añadir diferentes ingredientes como frutas, chocolate o frutos secos para personalizarla a tu gusto. Para aquellos que buscan una textura aún más esponjosa, la nata montada es el secreto. Usando la velocidad cuchara de tu robot de cocina, conseguirás un resultado perfecto cada vez. No solo es fácil de preparar, sino que también es ideal para quienes buscan un postre casero que se conserve bien durante varios días. Disfruta de este exquisito bizcocho de nata y sorprende a todos con tu habilidad en la repostería.
